Este artículo tiene el propósito de analizar cómo una animación en stop-motion puede ser utilizada para representar escenas específicas de una narrativa en acción real: las de los sueños, los recuerdos, los pensamientos y las alucinaciones del protagonista, o sea, su imaginarium diegético. También se observa sobre las apropiaciones de otros medios visuales para las representaciones de ambientes y emociones. Los análisis se centraron en la secuencia animada del sueño del personaje de Frida Kahlo, y sobre la escena en la que ella se corta el pelo, del largometraje de Julie Taymor Frida (2002). De acuerdo con los conceptos narrativos, del cine, de la retórica de la imagen y de la similitud de la animación de marionetas con el teatro, además de los asuntos culturales, se reflexionará sobre la imagen animada y su representación como parte integrante de un conjunto con la imagen filmada.